martes, 16 de septiembre de 2014

La socialdemocracia vuelve al poder en Suecia

La oposición de izquierda ganó las elecciones legislativas suecas con el 43,7% de los votos frente al 39,3% de la Alianza de centroderecha del primer ministro, el conservador Fredrik Reinfeldt, según el recuento final difundido este lunes por la autoridad electoral.

El resultado es casi idéntico al de hace cuatro años para la oposición, que gana una décima, mientras que el centroderecha pierde casi diez puntos porcentuales.
El Partido Socialdemócrata fue el más votado con el 31,2% y 113 diputados, 0,6 puntos y un escaño más que en 2010. El Partido Moderado (conservador) mantuvo la segunda plaza a pesar de perder un 7% y 23 mandatos, para lograr el 23,2% y 84 parlamentarios.

Tercero fue el ultraderechista Demócratas de Suecia, que subió más de 7 puntos, hasta el 12,9%, y pasó de 20 a 49 diputados de los 349 de que consta el Riksdagen (Parlamento).

Los aliados de los conservadores retrocedieron con respecto a hace cuatro años: el Partido de Centro, cuatro décimas y un escaño (6,1%, 22 escaños); el Partido Cristianodemócrata, un punto y dos diputados (4,6%, 17 mandatos); y el Partido Liberal, 1,6 y 5 parlamentarios (5,4%, 19 escaños).

Los otros dos componentes del bloque opositor de izquierdas, que esta vez no concurrió unido en coalición, tuvieron resultados opuestos.

El Partido del Medio Ambiente perdió medio punto y un escaño para acabar con el 6,8% de los votos y 24 mandatos; y el Partido de la Izquierda logró el 5,7% y 21 diputados, una décima y dos mandatos más.

Iniciativa Feminista, a la que algunos sondeos a pie de urna colocaban dentro del Parlamento, se quedó fuera con el 3,1% de los sufragios, 2,7 puntos más que en 2010.

La participación subió 1,3 puntos hasta el 83,4%, según el recuento final.

Los socialdemócratas tendrán sobre todo que hacer frente al histórico avance de los Demócratas de Suecia (SD), un partido de extrema derecha que se convertirá en la tercera fuerza del país con cerca del 13,0% de los votos frente a los 5,7% que obtuvo hace cuatro años, según las primeras proyecciones.
"Ahora nosotros lo decidiremos todo", dijo desafiante Jimmie Åkesson, de 35 años, el líder de este partido anti-inmigración que hasta ahora era marginal.
"Lo que estamos viviendo es la implantación de los Demócratas de Suecia en el paisaje político", lamentó por su parte el ministro de Exteriores Carl Bildt en declaraciones a la agencia de prensa TT.
El avance de este partido es parecido al de otras formaciones de extrema derecha en Europa, como el Ukip en Gran Bretaña, el Frente Nacional en Francia o el Partido Popular en Dinamarca.

Fin a ocho años de gobierno de la derecha

Estas elecciones marcan el final del reino del primer ministro Fredrik Reinfeldt, de 49 años, que ocupa el puesto desde hace ocho años y que a pesar de su buen balance económico paga el desgaste de sus reformas de corte liberal.
Sin finalmente Stefan Lofven se convierte en primer ministro podrá aprovechar la buena salud de la economía sueca y de las finanzas públicas pero la formación de un gobierno con los Verdes y el Partido de Izquierda podrían complicarse por cuestiones sensibles como la energía nuclear o la defensa.
El otro desafío de Lofven será la política migratoria que atrae cada años 80.000 refugiados a Suecia, un país de 9,7 millones de habitantes, y alienta el crecimiento de la extrema derecha.
Los votantes del SD son suecos que se sienten abandonados por los partidos tradicionales y rechazan el consenso que ha habido hasta ahora sobre la inmigración.
"Básicamente son votantes de las clases populares, de todas las edades, dos terceras partes de ellos son hombres", explica el politólogo Anders Sannerstedt. "No son marginales sino suecos ordinarios", asegura.
El SD es partidario de aumentar la protección social a los más desfavorecidos pero al mismo tiempo es conservador en cuestiones sociales.
Según las previsiones de la televisión pública, el partido de extrema izquierda Iniciativa Feminista obtendría 3,2% de los votos, menos del 4% necesario para entrar en el parlamento.

En Alemania, los antieuropeos ganan terreno

La canciller Angela Merkel y el resto del espectro parlamentario alemán han reaccionado ante el auge de los euroescépticos desmarcándose de una formación que recluta electores de todos los partidos y que, a diferencia de otras formas de voto de protesta, podría no ser de vida efímera.
"La respuesta del resto de los partidos debe ser la confrontación política con Alternativa para Alemania (AfD)", no la cooperación, apuntó Merkel tras la reunión de la ejecutiva de su Unión Cristianodemócrata (CDU) centrada en las elecciones regionales del domingo en dos "Länder" del este del país.
Al margen del impacto regional de esas comicios -la CDU defendió su posición de primera fuerza en Turingia y los socialdemócratas lo hicieron en Brandeburgo-, las urnas confirmaron el ascenso de AfD, que de extraparlamentario en ambos "Länder" pasó a lograr escaños en las dos cámaras legislativas.
El 10,6% de los votos logrado en Turingia y el 12,2% de Brandeburgo siguen al 9,7% alcanzado quince días atrás en Sajonia (asimismo en el este del país) y al hito marcado por la formación el pasado mayo al conseguir escaños en la Eurocámara.
En septiembre del año pasado esa formación había quedado fuera del Bundestag (Parlamento federal) al obtener un 4,7% de los sufragios, por debajo del listón mínimo del 5% necesario para obtener escaños, lo que ya entonces acogieron con alivio el resto de los partidos.

Tomado de: -http://www.teinteresa.es/mundo/socialdemocracia-Suecia-extrema-derecha-avanza_0_1211879881.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario